Análisis de «El Secreto de sus ojos» (Película)

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Una obra de arte sería el calificativo ideal para dicha película, esta película dirigida por Juan José Campanella que además de saber mostrar la vida de dichos personajes de una manera impecable, muestra muchos asuntos del acontecer de lo humano. El tema principal de la película es el caso de violación/homicidio de una joven hermosa llamada Liliana Colotto, y de cómo esta contingencia repercute en la vida de su esposo Ricardo Morales, en la de Esposito, Salvador e Irene que son miembros del juzgado encargado del caso.

La película transcurre en Buenos Aires en dos tiempos cronológicos, el primero en 1974 cuando sucedió el asesinato/violación de Liliana y el segundo después de 25 años cuando Esposito quiere escribir una novela acerca del caso y de lo ocurrido, a la misma vez que las experiencias, errores y decisiones de su propia vida se le vienen a la memoria lo que produce a la misma vez como una especie de terapia auto aplicada. Es aquí donde los elementos como el goce , los obstáculos característicos de un sujeto neurótico, se hacen notar en el escenario que es la propia vida de Esposito.

Para el análisis de la película tomaré la óptica del personaje principal Benjamín Esposito, como está en la misma pelicula, que ademas  se juega mucho el asunto del ver, o la mirada (no por nada el titulo de la misma), que se hace notar no solo en los juegos ópticos en la producción de la misma sino en el mismo personaje de Esposito ya que era un hombre muy observador. Para él el caso de asesinato fue particularmente espantoso, llegar a la escena del crimen donde yacía la joven ensangrentada lo abrumo de sobremanera. Liliana muere aparentemente en el momento cuando el amor entre ella y Ricardo estaba más vivo, cuando estaban más enamorados, dejando así a Ricardo con un amor eterno ciertamente, de esos imposibles.

Este amor también obsesionó a Esposito quien no había podido acceder al suyo que era Irene, su jefa directa, comprometida a otro, y a la que él creía muy superior al mismo en méritos como para que pudiera ocurrir algo amoroso entre ambos; Saboteándose de antemano el disfrute, a pesar de que Irene le correspondía abiertamente en cualquier momento su amor por él, amor que él parecía no ver, pese a ser ese hombre muy observador, lo que hace pensar en algún goce remitido a la mirada; Es en ese ver/no-ver (que vendrían a ser lo mismo) las señales de la amada donde el inconsciente de Esposito hace, a mí parecer su función de asegurarse el obstáculo de no poder tener a la mujer que él deseaba, Irene.

Durante toda la película se observa claramente el tema de la pasión, Esposito apasionado por el caso y por atrapar al hombre que hizo semejante atrocidad a tal amor que se tenían Liliana y Ricardo, un amor verdadero a los ojos de él. Estaba la pasión del asesino Isidoro Gómez, quien le escribía en clave de jugadores de Racing FC a la abuela, lo que llevó a Salvador a suponer que lo podían encontrar en un partido de dicho club, como realmente fue. Salvador en un dialogo entre él y Esposito, parece que con el saber de lo cotidiano, da una clase explicita de lo ruinoso de cada goce y dice algo como: “Yo me la paso de taburete en taburete echándome unas borracheras hasta que me sacan a patadas y aquí, teniendo una casa y una mujer que me quiere tanto que aun no me echa… ¿Y vos?… cuanto tiempo has pasado enamorado de Irene cuando sabes que ella tiene más ganas de casarse que Susanita (Personaje de Mafalda)…” finalmente dijo: “La pasión esposito, la pasión… las cosas van y vienen, los trabajos, los lugares, los eventos, pero la pasión sigue”.

Finalmente atrapan a Isidoro pero el sistema Argentino corrupto de la época no permite que cumpla su debida condena. Es así como por medio de la contingencia inicial, terminan matando a Salvador en casa de Esposito por equivocación y queda Isidoro libre. Dicho evento ocurrió precisamente el día en que Esposito y Irene se iban a ver en un café para ver que iba a pasar con ellos dos, como pareja. Esposito se tuvo que ir de Buenos Aires, un obstáculo perfecto ante Irene a quien dejo plantada sin un beso en la estación del metro mientras él se iba.

Se fue por 10 años, al volver Irene estaba casada y con dos hijos. Su amor nunca se pudo dar y no le podía echar la culpa al destino, cosa de lo que se da cuenta en el otro tiempo cronológico de la película cuando está escribiendo la novela. Un último esfuerzo por conseguir a Isidoro durante la escritura de su novela, lo lleva a un estado al que llamaría una fatiga, un cansancio de su repetición neurótica. Ya a esas alturas, después de 25 años Esposito se encuentra agotado de su personalidad.

Benjamín ubica al viudo Ricardo, ya con 25 años más. Viviendo solo en un área rural, en donde posteriormente se percata que tuvo prisionero a Isidoro durante todo ese tiempo, esta experiencia parece haber causado en Benjamín una ubicación distinta ante el deseo, ya que al final logra acceder al mismo teniendo algún encuentro con su amada Irene.

Autor: letrasdeblog

Psicoanalista, Escritor, entre otras cosas.

3 opiniones en “Análisis de «El Secreto de sus ojos» (Película)”

  1. Sólo valio mirarla para ver decantar en una sola frase toda la pelicula ,cuando Isidoro le dice a Esposito, quien lo descubre tras 25 años de cautiverio,»digale que aunque sea ME HABLE». El peso de la palabra…la condena del silencio, el otro…y todo lo que implica…

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